Entre los próximos meses de diciembre y enero se inaugurará en León el Museo Bíblico y Oriental; dedicado a las primeras civilizaciones y, de forma muy especial, a los testimonios escritos que de ellas se conservan, la colección Van Dijk, legada al sacerdote leonés Jesús García Recio, será expuesta en la antigua abadía de San Isidoro. Entre las piezas de la colección original hay que mencionar dos pictogramas de la época Uruk (hacia el 2.800 a.C.), textos cuneiformes fechados hacia el 3.100 a.C. (los primeros testimonios escritos de los que se tiene constancia), cartas paleobabilónicas sin descifrar (quizá porque se conservan los sobres de arcilla cerrados), un conjuro arameo contra los espíritus, etc. A estas piezas, en torno a 1.000, se unen 10.000 volúmenes que analizan todos y cada uno de los aspectos relacionados con las civilizaciones surgidas en torno a los ríos Tigris y Éufrates. La importancia de la colección ha animado al coleccionista español Francisco Antonovich a donar otras 100 piezas, entre ellas un sarcófago hebreo procedente de Jerusalén y fechado en el primer siglo de nuestra era. El propio Antonovich prestará al Museo Bíblico y Oriental un belén de 300 figuras procedente del antiguo Reino de Nápoles que se cuenta entre los más valiosos del mundo y que será el principal atractivo del Museo cuando abra sus puertas al público, durante la próxima Navidad.
Las actividades del Museo atraerán a León a especialistas de todo el mundo, y sus dependencias se convertirán en el mejor laboratorio para los estudiantes del Instituto Bíblico y Oriental, que durante los últimos años ofrece en León cursos de latín, griego, sumerio, acadio o hebreo.
17 junio, 2007
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1 comentario:
San Isidoro sigue siendo una abadía, porque de hecho sigue teniendo sus canónigos, que desarrollan su vida en comunidad.
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